El Sepblac pone a Abanca como 'objetivo prioritario' por
blanqueo de capitales
El organismo que persigue las operaciones sospechosas en la
banca ha llamado a capítulo al secretario del consejo de la entidad gallega por
sospechas sobre determinados clientes
Por: AGUSTÍN MARCO
Fuente: El Confidencial
Mientras Luis de Guindos hace campaña para ser presidente
del Eurogrupo, el Servicio de Prevención de Blanqueo de Capitales (Sepblac),
dependiente del Ministerio de Economía que él dirige, ha puesto todo su celo en
la situación actual de Juan Carlos Escotet, el empresario venezolano, al que el
Gobierno le vendió Abanca, la antigua Novagalicia. Una operación polémica que
puede ser una china en el zapato para las aspiraciones del todavía ministro.
Según ha podido saber El Confidencial, hace un par de meses,
Juan Manuel Vega, el director general de la institución que persigue los
delitos monetarios, pidió una reunión con el responsable del área jurídica de
Abanca y secretario del consejo, José Eduardo Alvarez Naveiro. El ejecutivo, un
histórico de la antigua Caixa Galicia, acudió a las dependencias del Sepblac en
Madrid, donde escuchó literalmente que el banco gallego se había convertido en
objetivo prioritario para la unidad de delincuencia financiera.
Álvarez Naveiro regresó a las oficinas centrales de La
Coruña con una honda preocupación, que le trasmitió a Escotet, el inversor
venezolano que compró Abanca en diciembre de 2013 por apenas 1.003 millones de
euros. El dueño de Banesco recuperó esa inversión en apenas un año al publicar
beneficios de 1.157 millones en el ejercicio 2014. El anuncio el pasado mes de
febrero de estos resultados provocó una serie de críticas contra De Guindos por
haber malvendido la entidad gallega, a la que se rescató con una inyección de
dinero público de 9.000 millones de euros.
El secretario del consejo de Abanca recibió órdenes del
Sepblac de extremar los sistemas internos de control de riesgos relacionados
con posibles clientes sospechosos y le reiteró que el banco era objetivo
“prioritario”. El organismo le informó que tenía sospechas de que a través de
Abanca podrían colarse en España operaciones de procedencia ilícita de clientes
latinoamericanos, tal y como se ha demostrado en Banco Madrid.
La filial de Banca Privada d´Andorra (BPA) fue la plataforma
que utilizaron tres exviceministros de Venezuela, el exjefe de inteligencia de
este país y un exdirectivo de la petrolera estatal PDVSA para blanquear dinero
desde el otro lado del Atlántico.
Foco en la propiedad del banco
Más aún, el organismo dependiente del Ministerio de Economía
y formado por inspectores del Banco de España informó a Álvarez Naveiro de que
una de sus preocupaciones era “la propiedad” del banco, en clara referencia al
accionista mayoritario de Abanca Holding Financiero, el titular del 88% de las
acciones de la entidad gallega. Es decir, el propio Escotet.
Esta firma, cuyo máximo accionista es Banesco, lanzó en
octubre de 2014 una emisión de bonos por 269,6 millones de euros convertibles
obligatoriamente en acciones de Abanca en el momento en el que la entidad
saliera a bolsa. Con vencimiento en 2019, estos bonos fueron suscritos por
"inversores cualificados", entre los que se incluyen algunos
vinculados ya al holding hispano-venezolano. El interés que pagó Banesco fue
del 10%, ampliable al 11%, si finalmente no se hacía la oferta pública de
acciones.
El diferencial es el habitual que se paga para compañías de
alto riesgo o high yield, perfil que no se adaptaba a la garantía que ofrecían
las acciones de Abanca, una entidad que había sido nacionalizada, limpiado su
balance de las operaciones más dudosas y con uno de los mejores niveles de
solvencia, según consta en los últimos test de estrés realizados por el Banco
Central Europeo (BCE). Es decir, Banesco pagó mucho interés a los inversores.
La entidad que actuó como coordinadora de los bonistas fue
Structuerd Finance Management Spain, una filial de SFM European Holding
Limited, sociedad con domicilio fiscal en Irlanda. La firma, que según su
propia página web corporativa no está regulada por la Comisión Nacional del
Mercado de Valores (CNMV), tiene como representante en España a Jaime José
Azcona San Julián, presidente de Goldwyns Auditores.
El hijo del guardián
José Eduardo Álvarez Naveiro Sánchez es licenciado en
Ciencias Económicas y Empresariales y Derecho por la Universidad Pontificia de
Comillas (Icade, E-3). Comenzó su actividad profesional en Uría Menéndez hasta
que en 1994 se incorporó a Caixa Galicia, donde trabajaba su padre. Esto es una
práctica habitual porque en la caja gallega por excelencia se sucedían los
cargos entre familiares, como demuestra que el primer ejecutivo, José Luis
Méndez, tenía a sus dos vástagos en funciones de responsabilidad.
Pero José Luis Álvarez Naveiro, el padre del actual
responsable jurídico, no era otro más. Era el hombre que guardaba todos los
secretos de José Luis Méndez, el gran banquero coruñés venido a menos tras la
intervención de la entidad por el Banco de España en 2010. Fue el subdirector
del departamento jurídico durante siete años y posteriormente el secretario
general de la caja a lo largo de tres lustros. Su poder era tal que, cuando
falleció a finales de 2006 el entonces presidente de la Xunta de Galicia,
Emilio Pérez Touriño, emitió un comunicado oficial con las condolencias. El hijo heredó los dos cargos.
1 comentarios:
Quisiera una seccion donde se pueda denunciar posible blanqueo de dinero de manera anonima. Existe? hasta gente hay que exponerlas y eventualmente detenerlas. Estan desangrando a toda una nacion.
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