La economía del
país está mal, muy mal, no hace falta entrar en detalles pero algunos sectores
de la industria prácticamente no han producido nada este ultimo año, el sector
automotriz redujo las unidades ensambladas en un 85% respecto al año pasado, no
hay carros para nadie, solo para el estado y los militares.
Las causas
de que no encontremos los productos en los anaqueles responde a dos
circunstancias principales, los precios a que fueron regulados algunos
productos hace que no valga la pena producirlos y muchos son sustituidos por
importaciones pero tampoco hay dólares para importarlos.
El problema
estriba en que durante muchísimos años Venezuela intento implantar una economía
rentista y una política paternalista por parte del Estado que llegó al colmo
durante el tiempo que gobernó Hugo Chave Frías. Venezuela es el único país del
mundo que se dio el tupe de plasmar en la constitución supuestos derechos que
no son tales…Como el derecho a la vivienda, que es realidad debería se
resultado de unos logros personales y en todo caso de cierta “ayuda” del
Estado, pero que en nuestro caso se obliga al gobierno en la práctica de
regalar una casa para cada familia venezolana.
El caso es
que tantos años de desvirtuar la realidad del país y de inculcar ideas
totalmente bizarras en la población han hecho estragos en nuestra sociedad, la
cual ha perdido todo sentido de la lógica y se desempeña de una manera
totalmente irracional y si se quiere destructiva. Los venezolanos han perdido
muchos de los principios éticos y morales debido a que a través de campañas mediáticas
se les ha hecho creer que lo que le sucede a la mitad de la población es culpa
de la otra mitad.
Un paquete de medio kilo de caraotas rojas 145,60 Bs.
Hoy estaba
escuchando a un ciudadano que maldecía a los comerciantes porque según él los
precios que ponen sus electrodomésticos son inalcanzables para un trabajador…El
ciudadano en cuestión no es capaz de comprender lo que significa una devaluación,
y cree que no tiene relación con los precios de los productos en el mercado.
Para él, los precios son algo así como un capricho de los comerciantes, idea
ampliamente reforzada por el gobierno y los líderes de la oposición que
constantemente ofrecen jornadas de ventas de bienes a “precios justos” cuando
en realidad lo que haces es ofrecer productos subvencionados para hacer
proselitismo político. Ese tipo de actividades refuerza la confusión en el
pueblo y el enfrentamiento entre consumidores y comerciantes…política funesta
que siempre deriva en saqueos y destrucción de bienes.
El gobierno
sabe perfectamente que lo que está pasando es producto del fracaso en el
intento de implantar un modelo repetidamente experimentado y fracasado en otros
países…pero no lo quiere admitir…Por el contrario, insiste en desvirtuar la
realidad creando matrices de opinión tales como “La Guerra Económica”, el “Sabotaje
Eléctrico” o la penetración de paramilitares para explicar el fracaso económico,
las fallas eléctricas y la criminalidad desbordada respectivamente.
Venezuela
enfrenta una realidad realmente deplorable, la destrucción sistemática del
aparato productivo, la dependencia casi exclusiva en la renta petrolera y el
endeudamiento programado para cumplir las necesidades más apremiantes sin la
posibilidad de que la economía salga del abismo donde se ha precipitado en
barrena.
Pero no es
lo que sucede lo peor de todo…sino lo que no sucede y en este caso es que el
gobierno y la oposición se pongan de acuerdo para decirle la verdad a los
venezolanos, que no es otra que se acabó el tiempo y hay que empezar a tomar
medidas que son desde todo punto de vista impopulares.
Esas medidas
son entre otras;
1) Desmontar el aparato burocrático y represivo que aplasta al aparato productivo del país…Leyes, resoluciones,
decretos y requerimientos totalmente
absurdos, políticas coercitivas criminales que hacen imposible el emprendimiento
y la productividad.
2) El Estado
debe dejar de regalar los combustibles, cobrar la electricidad, el agua y los demás
servicios, de manera que cubra los costos y deje unos dividendos que permitan
el crecimiento de las empresas encargadas de satisfacerlos.
3) Se debe
promover el trabajo como único medio para lograr satisfacer las necesidades de
una vida digna…Para ello hay que facilitar el emprendimiento y corregir las
leyes laborales que promueven la flojera y la falta de responsabilidad. Hay que
terminar definitivamente con “operativos” de venta de bienes importados por el
gobierno y subvencionados, que compiten deslealmente con los productos
nacionales, creando desempleo y financiando a empresas extranjeras.
4) El
Gobierno debe empezar a ver al empresario como un pilar fundamental en el desarrollo
de la economía y dejar de perseguirlo y satanizarlo como si fueran delincuente.
El gobierno debe dejar de importar
carne, leche, y alimentos de otros países y en su defecto pagarle a los
productores venezolanos la misma
cantidad de divisas que le paga a esos países. A la vez hay que sanear al país
de manera que deje de ser peligroso el tránsito de personas y mercancías a lo
largo y ancho de nuestra geografía, actualmente las vías están en manos de
bandas de asaltantes y forajidos.
5) Venezuela
debe revisar los tratados, convenios y negocios que se han hecho con otros países
y que dan la sensación de que no son nada ventajosos para nuestro país.
6) La oposición debe dejar de oponerse a
medidas que son inevitables como el aumento de la gasolina, el cobro de las
viviendas que construye el Estado, y sobre todo dejar de competir en demagogia
con el gobierno.
La demagogia no es patrimonio exclusivo del gobierno...es el principal enemigo de la democracia.
7) La medida mas
importante de todas, el Presidente debe empezar a decirle la verdad al
pueblo, no pueden seguir diciendo tonterías como que los venezolanos
tienen un salario mínimo superior a los mil dolares mensuales, esa
barbaridad ha desatado una ola de indignación entre los mismos
oficialistas. Un ministro ha llegado al colmo de señalar que las colas
se deben a un exceso de dinero en manos del pueblo y oro descarado que
las colas son para cuidar los alimentos...Ese tipo de aseveraciones
ademas de cínicas son un insulto a la inteligencia del venezolano...son
inaceptables, pero sobre todo solo le agregan presión a la olla.
Colas para comprar alimentos básicos...la situación es verdaderamente alarmante.
Si no se toman
las medidas correctivas inmediatamente, si no se hace una campaña por todos los
medios para replantearle la realidad a los venezolanos, si se sigue insistiendo
que la gasolina, las casas y los servicios deben seguir siendo gratis para más
del 60% de la población (que no pagan la luz ni el agua ni el aseo
domiciliario) entonces no podremos salir de esta miserable vida, habrá una explosión
social y el que venga no podrá implementar ningún tipo de cambios debido a que
no se le ha hecho ver la realidad a la población…En ese caso podríamos caer en
una cadena de eventos que harían a Venezuela ingobernable, un Estado Fallido en
caos total y absoluto, como ya ha sucedido en Irak, Libia, Siria, Egipto y
tantos otros lugares del planeta.
ALIANZA NACIONAL.
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