Caracas, 21 oct 2013.-
Señor Eduardo Fernández:
He venido expresando que no creo en senilidad de comunistas. Ahora leo con asombro elementos que me muestran a un Eduardo Fernandez, que actúa como si fuera un hombre con demencia senil, un comunista, o ambos. Pero como no doy credibilidad a lo uno ni a lo otro, le voy a exponer en lo que sí creo.
Reproduzco a continuación sus palabras luego de la muerte de una persona que llegó al gobierno con votos -tras una oferta engañosa- y se mantuvo con falsos votos, gracias a un complicado complot electoral, para entregar nuestra soberanía. Usted dijo:“su pérdida es muy lamentable, muchas veces reiteré que lo ideal para el país era que Chávez se recuperara y asumiera su mandato. Yo soy amigo de la familia del Presidente, aprovecho para hacerles llegar el testimonio de mi solidaridad”.
Eduardo Fernández, usted se expresa tal y como lo han hecho otros personajes que se nutren de las elecciones -sin importar que sean controladas, o en términos más sencillos, falsas-. Aún siendo un venezolano con suficiente experiencia en política, formación académica y participación en la vida pública como para permitirse olvidar que la variable más importante de la situación nacional actual es Cuba, usted pretende, como tantos otros, apurar el paso, como si nada.Hablar de mayorías, olvidando que el árbitro dejó de existir formalmente en abril del 2013, podría ser un desliz propio de un político jóven, con deseos de aparecer en la prensa o en Globo, pero no es lo que se espera de quien debería ser un viejo zorro. Obviar que Vicente Díaz, Sandra Oblitas y Tibisay Lucena ya no son rectores del CNE, y que Tania D´Amelio y Socorro Hernández no podían serlo, no es propio de un “líder demócrata de oposición”. Así, sería deseable que alguien como usted ya hubiera notado que el CNE dejó de existir, al menos en los términos previstos por el artículo 296 de la constitución. (http://www.analitica.com/bitblioteca/anc/constitucion1999.asp)
Pero más allá, una atenta lectura de sus palabras, que debe ser responsablemente realizada en virtud de lo que representa Eduardo Fernández para varias generaciones de demócratas, pone en evidencia varios contrasentidos.
Por ejemplo, cuando escribe “La oposición ha logrado rozar el 50% de los votos” está diciendo, primero que cree en los resultados publicados por el CNE a pesar de toda la evidencia acumulada sobre su absoluta falsedad; y segundo, que estamos por debajo del 50%, es decir, que según usted, y en contraposición a lo expresado por María Corina Machado, seríamos minoría. Esto -sabemos- es totalmente falso. Asume que el registro electoral es confiable, que las máquinas de votación no mienten, que la transmisión es fidedigna y que la auditoría negada a la oposición, nunca fue necesaria. Pero por encima de todo, está sentenciando que todo cuanto dijo Capriles a raíz del complot electoral perpetrado el 14 de abril, SERÍA MENTIRA!!! (http://cnnespanol.cnn.com/2013/04/15/capriles-llama-ilegitimo-al-presidente-nicolas-maduro/)
Luego, con la frase “Las encuestas más confiables parecen indicar que a la fecha de hoy somos más los venezolanos que militamos en las filas del cambio que los que se mantienen en las filas del continuismo” intenta pasar aquella página histórica de Eric Ekvall, donde había dejado justamente calificadas a las encuestas, como parte necesaria del COMPLOT contra la voluntad del electorado. (http://porlaconciencia.com/?p=3458)
Miente con eso de “Sin embargo, como ciudadano de a pie sigo esperando que la oposición termine de dar un salto cualitativo para que se convierta en una verdadera alternativa de gobierno.”, básicamente porque usted no es un ciudadano de a pie! No se moviliza en Metro ni en carrito. No sabe lo que es hacer una cola de dos horas para montarse en una camionetica para llegar a su casa. Además, usted no está para esperar, es un líder. De hecho, por eso escribe y lo leen. Tiene las herramientas para que se produzcan cambios, no para esperar que ocurran antes que la “rana eche pelos” y si con su experiencia, no ha entendido que la tiranía y la abolición de la soberanía no se pueden solucionar con “alternativas de gobierno”, retírese. No minimice las cosas, como si no nos gustara el vinotinto y pudiéramos considerar el vestirnos de azul. Si no está en capacidad de entender que esto no es un gobierno democrático, debe pasar a retiro, seriamente hablando.
Pero para ser franco, considero que alguien de su trayectoria, entiende perfectamente la realidad. Usted no puede andar tapareando tiranías. En realidad, a estas alturas, no se puede seguir aceptando que usted, y otros políticos como usted, sigan negando la realidad para poder sobrevivir. Ya hay toda una generación de venezolanos que se ha saturado de ese coqueteo irresponsable con el actual gobierno, los hemos señalado, y los seguiremos señalando de manera pública. No nos interesan las razones que lo llevaron a escribir tan insensatas declaraciones, pero sí nos preocupan los efectos que tienen sobre los más descuidados, los menos enterados y los más manipulables.
Lo que usted ha escrito, como todo lo que aparece en medios digitales, tiene consecuencias. Comprenda que así como yo asumo las consecuencias de lo que escribo, usted deberá asumir las suyas, y quizás sea la comprensión de esto, en un desesperado intento de evitarlo, uno de los móviles de perpetuar sus irresponsables acciones.
Buenas noches.
Ludwig Moreno
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