24 hora después de la violencia en Belo Horizonte
entre grupos de vándalos y las fuerzas policiales, una persona ha
fallecido durante una nueva batalla campal en Fortaleza, con motivo del
partido entre España e Italia, según informa la agencia de noticias AP.
Dos horas antes de empezar el juego, cinco mil manifestantes protestaban contra
los gastos excesivos de la Copa de las Confederaciones. Entre ellos
hubo grupos violentos que se enfrentaron contra la policía, lo cual dejó
a tres agentes y un manifestante herido.
Los enfrentamientos se dieron en los alrededores del estadio Arena
Castelão. Todo empezó cuando los vándalos secuestraron y asaltaron un
autobús de civiles, y pretendieron lanzarlo contra la policía, que
reaccionó con fuerza. Además, los manifestantes consiguieron romper el
cordón de los agentes, lanzando piedras y bombas caseras contra ellas.
Algunas de las personas que estaban llegando al estadio se encontraron en medio de la violencia y sufrieron los efectos
de los gases lacrimógenos lanzados por la policía. Habitantes cercanos
al estadio tuvieron que proteger sus casas para evitar que los grupos de
violentos pudieran saquearlas.
En la Avenida Dedé Brasil, la manifestación ocupó pacíficamente las
dos pistas de la avenida que conduce al estadio. Manifestaciones
violentas eran ya esperadas en Fortaleza desde hace días, como ocurrió
en Belo Horizonte. Una vez más, la impresión de muchos fue que la
policía no consiguió aislar a los violentos antes de que comenzasen las
protestas.
En Fortaleza, y en general en Brasil, los hinchas han estado a favor
de Italia por temor a que la selección tenga que enfrentar a la temida
España en la final. Sin embargo, antes de esta coincidencia, España se
había convertido en el equipo mundial favorito de losbrasileños. Los
hinchas han sido muy críticos con la nueva selección, ya que no acaba de
levantar lel entusiasmo de las anteriores, que llevaron a Brasil al
pentacampeonato.
El País
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