VIVA VENEZUELA LIBRE!!!!!!

VIVA VENEZUELA LIBRE!!!!!!

EL FUTURO EN LA CALLE!

EL FUTURO EN LA CALLE!

En homenaje a nuestros héroes caídos y a nuestros presos políticos!!!

En homenaje a nuestros héroes caídos y a nuestros presos políticos!!!
Vuela alto hijo mío!!!...

A quien dió todo por su amor a Venezuela!!

A quien dió todo por su amor a Venezuela!!
" "VENEZUELA EXIGE LA LIBERTAD DE NUESTROS PRESOS POLITICOS!!!"....

domingo, 21 de abril de 2013

La liebre y la tortuga

No hay nada más difícil, para aquellos los que gustan hacer públicas sus opiniones y análisis, por más errados o acertados que sean, que dirigirse a un público notoriamente sensible a lo que se va a abordar, sin temor a ser malinterpretado e incluso etiquetado erradamente por no expresar las ideas que se quieren escuchar. No obstante, asumiré el riesgo.
He leído varios análisis de lo que pasó en el país el 14 de Abril, un lado lo observa lógico y natural obviando la pequeña brecha que lo separa de haber experimentado una derrota y, el otro lado, con documentos en mano, hace eco de situaciones irregulares que pudieron haber inclinado la balanza de manera favorable a sus aspiraciones. Obviamente hay otros, más aguerridos, que han hablado nuevamente de fraude y a través de videos y esquemas, explicaciones técnicas y otros artilugios ofrecen sustento a esa teoría.
Sin embargo creo que la lectura debe ser otra, una que desafíe nuestras emociones y nos obligue a ser más objetivos, ya que, solo al ver con claridad y sin el velo de lo que pudo ser y no fue, será posible explorar soluciones reales y no limitarnos a simples acciones repetidas y estériles.
El resultado del 14-A
En mi artículo De Cara al 14A http://persardenuevo.blogspot.com/2013/03/de-cara-al-14a.html hice una afirmación de la cual, estoy seguro, ningún miembro de la Mesa de la Unidad y del Comando Simón Bolívar desconocía: “mientras las condiciones electorales fueran las mismas del 7-O estábamos en desventaja”.  Pinilla lo ilustra muy bien en la siguiente gráfica:

(Aunque el brazo debería decir “Oposición” en lugar de “Capriles”, puesto que no se trata sólo de él) 



Era algo básico y elemental, ¿cómo podía pretender la oposición lograr su objetivo con las mismas condiciones que había criticado apenas unos pocos meses atrás? La idea del voto masivo, recordando la experiencia de Chile frente a Pinochet (1988), sonaba prometedora e inspiradora, pero no tomaron en cuenta que esa votación (plebiscito) fue manual y no electrónica y que la Venezuela de hoy no es el Chile de ayer.
Cualquiera puede alegar que el tiempo era muy corto para lograr cambios significativos en las condiciones electorales, pero no es así. Lo que ocurrió es una evidente falta de planificación y estrategia de los que se han auto-designado representantes de la oposición venezolana.
Veámoslo así, cuando el 2006 la oposición perdió las elecciones quedaban dos opciones posibles: esperar al 2009 y solicitar un referéndum revocatorio o dejar que Chávez culminara su mandato y someterse a las elecciones presidenciales de 2012. Como todos sabemos esto último fue lo que se hizo, pero esa espera de seis años debió haberle dado tiempo suficiente a la oposición de organizarse y planificar, dentro de las tareas que tenía pendiente estaba la exigencia de mejores garantías electorales, pues, independientemente de lo que se piense, ese es el punto neurálgico de todo el proceso. Pero no se hizo, al menos no de manera contundente y determinante. Tampoco lo hicieron en 2010 cuando faltaban dos años para las elecciones presidenciales.
Como ciudadanos podríamos suponer que, políticamente, estaban deshabilitados para hacer tales exigencias pues, en 2011, la oposición, aún contando con organizaciones como Súmate, por citar un ejemplo, hace uso del CNE –que hoy critican y señalan–, para elegir al candidato de la Unidad, manifestando con ello que: 1) Confían en el árbitro y 2) Que el proceso es confiable. ¿Cómo decir luego que no lo es? Si funcionó para ellos, ¿qué impide que funcione para todo el país?
Otra de las cosas que pueden justificar la ausencia de exigencias firmes y contundentes de más y mejores garantías electorales fueron las apresuradas declaraciones de Capriles aceptando el triunfo de Chávez el 7-O a pocos minutos de ser anunciado por el CNE; tales imágenes y sonidos quedaron en la memoria colectiva de quienes lo apoyaron, si él, el ahora llamado máximo líder de la oposición, se paró frente al país y asumió su derrota, tenía que responder a que los escrutinios reflejaban la realidad, no podía ser de otra manera… ¿o sí?
El punto es que no ante la opinión publica se dijo que el tiempo era corto para exigir mejoras, aunque el mandado fue hecho tanto por la MUD como por otros representantes opositores, en pleno conocimiento que pasaría nada, que las condiciones iban a ser las mismas (es utópico pensar que no lo sabían) y también se delegó la responsabilidad en los estudiantes para que el pueblo venezolano percibiera que no se había dejado de ejercer presión por ello.
Pero las condiciones fueron las mismas del 7-O y los resultados, por más pequeñita que haya sido la brecha y aunque esté sujeta a un “mientras tanto”, fueron los mismos que los del 7-O.
Claro, obviamente no fueron los mismos en términos matemáticos, pues se sabe que la oposición ganó más de  un millón de votos si se compara con los anteriores comicios; hago referencia a términos absolutos.
Para ilustrar mi afirmación la pondré en un ejemplo sencillo y cotidiano: Si al jugar la lotería usted compra el 14 y sale el 15, sí, es cierto, usted perdió por 1 punto, pero así hubiese salido el 14,01 o el 13.99 (si pudieran salir esos números, por supuesto) igualmente no es el 14 que usted jugó, serían números totalmente distintos por lo que, sea como sea, no ganó.
La denuncia de vicios, excesos, irregularidades y cuanto se pueda señalar se ha convertido en un anuncio esperado en los últimos 14 años, cosa que no fue tan publicitada el 7-O aunque sin duda tuvo que haber ocurrido algún caso en esa fecha, sin embargo, que Capriles haya salido a denunciar las irregularidades y no aceptar el triunfo del otro candidato era algo que quienes lo apoyan esperaban y que políticamente estaba obligado a hacer, pues, si volvía a repetir que había perdido él y no el país y que “el tiempo de Dios es perfecto” habría causado tal decepción y rechazo que sus días como político de masas hubieran desaparecido de inmediato.
En lo que respecta a los resultados, hayan sido los correctos o no, por más esperanzados que se estuviera de lograr un cambio, ante una realidad como la que vive el país, resultaba prácticamente obvio que no serían distintos a los que se anunciaron.
Obviamente que las concentraciones opositoras parecían pronosticar un triunfo seguro, fueron imponentes, sobrepasaron las expectativas e ilustraron el deseo de cambio que se expresaba en sus discursos. Pero los deseos y las buenas intenciones por sí solas no han cambiado jamás el curso de la historia, se requiere de acciones que modifiquen lo que impida su realización y esas acciones pasan por crear condiciones más equitativas, transparentes y confiables para los futuros comicios.
La oposición podía ganar y pudo haber ganado, pero si y sólo si hubiese logrado impulsar mejoras en las condiciones electorales, al no hacerlo, incurrió en el error de la Libere, esa a la que hace referencia Esopo en su fábula, la Liebre, que era más ágil, más rápida y más enérgica pero que se confía de su superioridad ante la torpe y lenta tortuga, siendo ésta última quien finalmente termina por ganar la carrera.
Como no se trata de hacer leño del árbol caído, les dejo aquí 3 propuestas factibles que pueden cambiar el futuro del panorama electoral, si se logran implementar:
Como se insiste en que la votación sea electrónica, pues ninguno de los lados se ha plantado en que no lo sean, entonces:
  • Instalación de pantallas que muestren el comportamiento a nivel nacional e internacional del voto en tiempo real: Sí, ¿por qué tiene que ser un misterio la totalización de los votos? ¿por qué tiene que hacerse encerrados en una sala sin observadores, testigos y medios de comunicación? Ni el CNE es el cónclave ni estamos eligiendo a un Papa. Tal y como ocurre en los juegos de béisbol y fútbol, por citar dos, bien podría existir un marcador electrónico que indique quien va ganando y quien va perdiendo. Sin secretos, sin maquillaje, sin negociaciones. Y, para garantizar el secreto del voto (casi imposible hoy día porque las personas abiertamente se declaran simpatizantes de un lado o del otro) la actualización se haría cada x votos para que así no se sepa por consecutivos por quién votó cada persona. ¿Quieren votos electrónicos? Chévere, busquemos soluciones electrónicas.
  • Hacer uso de las redes bancarias: Uno de los sistemas más susceptibles a ser auditados y con menores posibilidades de error es el sistema bancario. Si usted tiene 100 y gasta 50, de inmediato, esté en China o en Maturín su saldo se actualiza a los 50 restantes. ¿Por qué no hacer uso de las redes bancarias para que el voto se emita desde ellas? ¿No son los bancos entidades seguras sin la presencia militar? ¿No lo serían aún más ese día con el resguardo de ellos? Los domingos, días escogidos para las elecciones, no son hábiles para los bancos, por lo que sus instalaciones bien podrían utilizarse en lugar de las escuelas y, hasta donde sé, la red bancaria es aún más prolifera, confiable y segura. ¿Quieren votos electrónicos? Chévere, busquemos soluciones electrónicas.
  • Hacer uso de las telecomunicaciones y redes sociales: A través de una página web podría monitorearse en tiempo real (ahí si no hay problema que sea segundo a segundo) el comportamiento de las votaciones, puesto que sólo se verían cómo cambian los números y lo podría hacer cualquier venezolano en cualquier momento y en cualquier parte del mundo. Y, así como mandan mensajes de texto invitando a votar, cada tanto (según lo haya elegido el ciudadano) le llegaría un mensaje con los resultados hasta ese momento. Si no quieren recibir textos se podría revisar en una cuenta en Twitter o bien en una página de Facebook oficialmente abierta. Para los que no creen que esto es posible los invito a visitar la página: http://countrymeters.info/es/Colombia/ donde minuto a minuto se muestra cómo se comporta la población entera de Colombia (más de 47 millones de habitantes) en un mismo lugar y en tiempo real. Si se puede hacer con ese número de personas, ¿no se va a poder hacer con 18.9 millones de votantes? ¿Quieren votos electrónicos? Chévere, busquemos soluciones electrónicas.
Por supuesto que tengo más ideas, pero no le voy a hacer la tarea a quienes deberían ser los responsables de proponerlas y ejercer presión hasta que se implementen, a menos que me las pidan apropiadamente.
Cosas como estas debieron pensarse y proponerse en el pasado, no se hizo; bueno ahora tenemos tres años (si se piensa en un posible revocatorio) o seis para que los 7.5 millones de venezolanos que deseamos un cambio exijamos más y mejores condiciones, no esperemos que lo hagan quienes nos han hecho perder 14 años aplicando las mismas viejas y gastadas formulas políticas de siempre.
Las auditorias de los elementos restantes
Cuando Capriles declaró que exigiría las auditorías la mitad del país se esperanzó de tal manera que no quedó olla alguna sin una abolladura, pero al hacerlo se obvió la posibilidad que a los resultados de las elecciones se le diera el tratamiento de “cosa juzgada” y por ende, una vez anunciado, proclamado y juramentado el presidente no habría marcha atrás. Y por los vientos que soplan así va a ser. Basta con repasar las declaraciones de Sandra Oblitas del CNE cuando aseguró que “los resultados son irreversibles, la auditoria no los cambia” (ver video: http://dolartoday.com/video/cne-los-resultados-son-irreversibles-la-auditoria-no-los-cambia/). Obviamente se podrá recurrir a instituciones internacionales, pero sin duda llegaremos a la mitad del mandato sin tener una respuesta de alguna de ellas, como ha sucedido en el pasado.
¿Qué hacer?
Einstein decía “hay dos formas de ver la vida: una es creer que no existen milagros, la otra es creer que todo es un milagro”, y dentro del realismo mágico, los venezolanos encontramos nubes con la forma del país, palomas blancas y cuanto consideramos posible tildarlo de una señal divina del triunfo de Capriles. No sobraron símiles como el de “David contra Goliat” y otro, muy exagerado,  como el expuesto por Guillermo A. Cochez ‏ cuando eleva a Capriles a la figura de Jesús al tuitear el pasado 18/4: “El Señor te ayudará a sacar a fariseos del Templo. Lo ensucian con sus trampas e inequidades”. Por lo tanto:
  • Tenemos que dejar de endiosar a los candidatos, la oposición se refiere hoy a Capriles como ayer lo hacía una mayoría con Chávez y eso no ayuda ni muestra síntomas de madurez política. Hemos llegado a esta realidad del país por empeñarnos en perseguir a un mesías.
  • Tenemos que dejar de esperar milagros, de buscarlos desesperadamente en cuanto acontecimiento ocurra. ¿Queremos un milagro? ¡Seamos el milagro!
  • Si no podemos reingeniar al Estado, porque se perdió la posibilidad, al menos reingeniemos a la oposición, ya es evidente que las tácticas y estrategias que han usado son ineficientes e ineficaces. Actualicemos el programa, creemos una MUD 2.0, algo que deje atrás lo obsoleto y de cabida a ideas y acciones (democráticas, pacíficas y ajustadas a ley) nuevas y brillantes.
  • Se sabe que Abraham Lincoln falló durante 28 años seguidos antes de lograr ser el presidente de los Estados Unidos, creo que ese no debe ser un aliciente para la oposición, ella no se puede dar el lujo de seguir perdiendo y para ello necesita dejar de hacer lo que ha hecho siempre: escoger, vender y endiosar a un candidato. En su lugar debe crear a un equipo, no con la misma gente, no con las mismas líneas políticas, sino con mentes cuyo único compromiso sea el bienestar y el progreso del país, no una tolda, un proyecto o un color.
Einstein también dijo: “locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener diferentes resultados”, y es obvio que en 14 años la oposición ha seguido repetidamente la misma línea de acción; no creo que esta frase sea tan difícil de entender. 

http://persardenuevo.blogspot.com/2013/04/la-liebre-y-la-tortuga.html

0 comentarios:

Publicar un comentario

Haga su comentario

 
Design by Free WordPress Themes | Bloggerized by Lasantha - Premium Blogger Themes | Hot Sonakshi Sinha, Car Price in India