Caracas, 11 de febrero de 2012. El periodista Leocenis García, en su columna “Leocenis habla claro”,
publicada por 6to Poder, habla sobre las Primarias de la Mesa de la
Unidad Democrática que se llevarán a cabo este domingo 12 de febrero y
que podrían cambiar la historia política del país:
“Una
vez más, algunos monosabios de los medios han hecho y deshecho -no por
sus periodistas, a los que la sociedad civil les debe mucho de los
frenos que se han puesto al totalitarismo y al abuso del poder-, sino por los dueños de esas empresas de comunicación o por quienes accidentalmente los dirigen.
Para
estos no es el interés de una Venezuela maltratada por el hambre, el
desempleo, la profunda corrupción moral que hoy llena los espacios de la
vida nacional lo que impera, sino sus personalísimos intereses.
El abuso que algunos de estos señores han cometido en nombre de la
libertad y la democracia no tiene precedentes. Uno de ellos, creyente,
que desciende de una familia de poder que llegaron en mulas y vendiendo
bombillos, ha pretendido imponer sin disimulo la candidatura de uno de
los aspirantes, sólo porque ambos estudiaron juntos y porque este
representa la derecha más mezquina, esa misma que dio todos los
argumentos sustanciales para que Hugo Chávez sea Presidente.
Son
estos mismos los que nos hicieron correr y alentaron la aventura de
Carmona y sus gorilas. Son los mismos que hicieron navegar a la
oposición en el más vergonzoso mar de la improvisación y que
proporcionaron gratuitamente las imágenes más bochornosas del ridículo,
la insensatez y la torpeza, que le dieron la vuelta al mundo en
documentales y folletos de propaganda del régimen.
Si ellos y su
candidatura triunfan hoy, doy por descontado que Chávez será
Presidente. Tendrá Hugo Chávez toda la argumentación para ir en contra
de la “oligarquía” los “pitiyanquis”, “los ricos contra pobres”, en fin,
toda aquella basura y raciocinios que tristemente una parte de la
población sigue comiéndose, y que son las razones por las cuales Chávez
es Presidente de Venezuela.
De
manera que hoy, la gente que está en las colas del proceso primario
debe votar con conciencia de lo que pudiera resultar de su elección. Si
quienes hoy van al proceso de Primarias se dejan alucinar por lo que
venden algunos dueños de medios, podrían quedarse rezagados en lo peor
de la historia de la oposición al Presidente Hugo Chávez. Le
leí a la profesora Marta Colomina (con la cual mantengo los más enormes
afectos) en Twitter, hace días, que no se podía dejar llevar por la
campaña contra algún candidato de los que hoy se miden. A mi
manera de ver las cosas, en política los asuntos no son tan alegres, y
no se puede uno meter en la vida pública creyendo que la inclemencia de
la opinión pública no se verterá sobre nosotros. Estoy en
contra de ese “rinquintín” de la anti política, de ese pretendido empeño
de desprestigiar a los partidos si como la inmensa mayoría de los
jóvenes que hacen vida en ellos fueran también responsables de los
abusos y errores del pasado. Es un discurso maniqueo que no acepto y no
aceptaré.
Cuando Irene Sáez fue
candidata a la presidencia, aupada por algunos medios (que después la
dejaron en la cuneta) yo tenía 17 años de edad, vi entonces el caldo de
cultivo de lo que venía, la banalización de la política, el descrédito
de los partidos y las terribles consecuencias a lo que aquello nos
llevaba. Veo ese peligro hoy, y yo no voy a pegarme
irrestrictamente al coro de las cobardonas que por sus intereses
mezquinos claman y exigen prudencia.
Hipócritas, no es prudencia lo que piden sino complicidad con todo lo que quieren construir para sus intereses económicos.
Creo correcto expresar la angustia que llevo por dentro, y aún cuando
estas líneas pudieran resultar inútiles para lo que siento, debo
advertir que quedarán como prueba irrefutable de que no callé cuando
debía hablar. Mañana mis hijos no podrán reclamarme. Yo cumplí.
Hoy la oposición pudiera cometer su última gran estupidez, espero que no sea así. A Votar. “
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