Foto: Ana Vanessa Herrero / Noticias24
(Caracas, 31 de enero – Noticias24) Faltan días para que se cumplan 20 años de aquel golpe de Estado de 1992. El levantamiento militar dejó secuelas en la vida política del país, así como en la vida personal de cada uno de los implicados. Jesús Urdantea fue uno de ellos y este lunes contó su historia entrelazada de recuerdos que llevaron a la esperanza de un cambio de Gobierno por las armas.
Jesús Urdaneta es en la actualidad candidato independiente a la gobernación del estado Guárico y fue uno de los 4 comandantes que lideraron el golpe del 4 de febrero. Urdaneta, en particular, fue el elegido para tomar Maracay.
El Comandante a través de una entrevista en el programa de Mario Villegas “Una sola Venezuela”, que transmite Noticias24 Radio,
aseguró sentirse arrepentido de sus actuaciones y además llama a la
población a buscar el cambio a través de un sistema democrático.
“Chávez siempre fue el inquieto”
Durante la entrevista, Urdaneta mencionó que de todos los que se unieron “Chávez siempre fue el más inquieto”.
Recordó que una noche, estando él de guardia, se consiguió con el actual Presidente de la República y este le habló sobre la situación que atravesaba el país.
“Chávez me preguntó si estaba de acuerdo con lo que estaba pasando en
el país (…) yo le dije que no y el me planteó unirnos” en el grupo de
oficiales “decentes”: “Eso me pareció buena idea”.
Explicó que Chávez diferenció entre el grupo de los “vagabundos, que
se tapaban todo” y el grupo de los “decentes”. Por supuesto, ellos
pertenecerían al segundo.
“A nosotros nos imponían trabajos”
Urdaneta dejó claro que la situación que se de desenvolvía dentro del grupo formado era de análisis profundo de la realidad político – social. “A nosotros se nos imponían trabajos (…) por ejemplo hablábamos de la pobreza y me daban dos meses para investigar. Luego nos reuníamos a discutir” lo que se había elaborado.
“La primera vez que pensamos en el golpe”
El caracazo fue, según el Comandante, el acontecimiento histórico que hizo pensar por primera vez en tomar el poder a través de las armas. A pesar de que ya se había hecho el juramento del Samán de Güere, Urdaneta explicó que este acto simbólico “jamas fue visto” como un inicio al golpe.
“El juramento lo asumí como un hombre digno en función de que se profundizara la democracia.
Sabíamos que había muchísima miseria y luego se presenta esa tragedia y
nos sacan a tratar de controlar por un lado y reprimir por otro”, dijo.
“Fue algo tan anárquico el conocido caracazo (…) que en ese momento hubo una gran manifestación de odio”, resaltó.
La otra cara del Golpe
Urdaneta es uno de los cuatro Comandantes que hoy no forma parte del chavismo.
Esta decisión, tomada por voluntad propia como él mismo lo expresó, se
forma desde los primeros pasos para preparar la toma del país.
“Se decide irrumpir con las armas cuando se observó el desespero de la gente (…) Cuando pude ver eso, yo me dije que no podía ser cómplice”, dijo durante la entrevista.
Relató detalles de los planes elaborados por los militares y mencionó
que “inicialmente, yo tenía que venir a Caracas con Chávez (…) pero
posteriormente, y de forma muy injusta, él (Chávez) había señalado 16
objetivos (instalaciones militares), de los cuales él tenía 2 y yo 14″.
Según el Comandante, todos los actos previos demostraron “mucha cobardía” de parte de algunos implicados.
“Cuando le dije a Chávez que no estaba de acuerdo me retiré por considerarlo una loquera militar“.
Sin embargo, esta decisión no duró mucho, ya que en enero de 1992, el
actual Presidente le comentó que volviera para tomar Maracay, ya que
Acosta Chirinos estaría con Chávez en Caracas.
“Yo le advertí que no le hiciera lo mismo que a mí, porque no era justo”, expresó.
La evaluación del golpe: cobardía y perdón
“Todos menos chávez cumplieron con su deber“, aseguró enfáticamente Jesús Urdaneta Hernández mientras hacía un recorrido histórico para evaluar el pasado.
“Él (Chávez) llegó al Museo Militar a observar todo, si alguien mostró cobardía fue Hugo Chávez“,
resaltó. “Los compañeros de la fuerza aérea me llamaron a las 12 de la
noche a decirme que estaban neutrales, algo que no entendí (…) ellos
nunca nos agredieron ni nosotros a ellos”.
Durante su relato, saltó inmediatamente la palabra perdón:
“El perdón siempre lo he pedido; perdón al país y a mis conciudadanos.
Yo no quería poder, lo único que he querido es que en mi país se
profundice la democracia”.
“Hemos visto como este desgobierno le ha causado tanto daño al país. Yo asumo mis responsabilidades, me equivoqué. Tomé como joven un atajo y ahora entiendo que uno se equivoca”.
“La mayoría de los que estábamos ahí lo hicimos por ideales, ellos lo hicieron por otros motivos (…) para algunos seré siempre un golpista“, dijo, pero aseguró que nunca sería de “este tipo” de Gobierno.
Sin embargo, los contactos y reuniones a veces se perdían por los trabajos propios del oficio militar, pero “el que más hacía esfuerzos” para mantener esos lazos firmes “era Chávez”.
Sin embargo, los contactos y reuniones a veces se perdían por los trabajos propios del oficio militar, pero “el que más hacía esfuerzos” para mantener esos lazos firmes “era Chávez”.
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