Foto: Joaquín Pérez Becerra alias "Alberto Martínez" - Farc
La situación está como para alquilar balcón, a los ojos de un observador desinformado parece ser un escenario de las más alta cooperación internacional entre los gobiernos de Colombia y Venezuela, mandando criminales a ser juzgados en sus países de origen; pero no nos llamemos a engaños estamos en realidad frente a las movidas de un par de experimentados políticos como lo son Santos y Chávez, quienes se acomodan perfectamente a hechos y circunstancias; vamos a analizar un poquito más en detalle el tema, ustedes juzgarán si es que yo hilo muy delgado.
Tal y como lo mencioné en un artículo anterior, ambos países necesitaban recomponer sus relaciones y los presidentes, muy prácticos ellos, decidieron hacerlo; así que los empresarios colombianos son pagados a cuentagotas y los ciudadanos venezolanos vuelven a recibir bienes de consumo que llegan más fácil, rápida y económicamente desde Colombia.
Chávez necesita limpiar su imagen de protector de terroristas y ha extraditado a Colombia algunos mandos medios del eln y las farc y Santos le ayuda diciendo que su mejor amigo está cumpliendo los compromisos de seguridad y antiterrorismo….. y no solo eso!!!, Santos dice que los campamentos guerrilleros ya no están en las zonas de Venezuela que el Presidente Uribe denunció ante la ONU, claro ni bobitos que fueran de quedarse ahí. Eso NO significa que la guerrilla haya salido de Venezuela o que deje de refugiarse allá después de hostigar a las Fuerzas Militares colombianas; estas son afirmaciones de militares y civiles que están en la frontera con Venezuela y viven esa situación a diario; y que más comprobación que el llamado que hace el secretariado de las farc a sus miembros para que dejen la vida fácil en Venezuela y vengan a Colombia a combatir.
Santos por su lado ha decidió no enviar a USA a Walid Makled y si extraditarlo a Venezuela, es una jugada magistral para mantener unas relaciones muy delicadas con el vecino y una respuesta muy significativa al desdeño con el que el gobierno Obama ha tratado a Colombia.
Chávez tiene un temor increíble ante las declaraciones que pueda dar Makled, este último dijo que lo que podía probar sería motivo suficiente para que Chávez fuera atrapado por los gringos igual como le sucedió a Noriega en Panamá; ya nunca sabremos lo que Makled tenía por decir, pues no cabe la menor duda que al llegar a Venezuela será silenciado, Chávez tiene un control absoluto de todos los poderes en Venezuela y por lo tanto hace lo que se le da la gana y en este caso lo que mejor le sirve es que Makled no hable.
Chávez ha deportado a Colombia al terrorista Joaquín Pérez Becerra (relacionista de las farc en Europa y director del website anticolombiano Anncol) en tiempo récord y a costa de unas cuantas críticas de los ultraizquierdistas de sus partidarios revolucionarios; pero eso no es otra cosa que otra astuta movida propagandística de Chávez y Santos le ha ayudado a echarnos el cuento. Una vez el terrorista de anncol, abordó el avión en Alemania, se prendieron las alarmas pues el tipo ese tiene circular roja de Interpol, así que todos los países miembros de esa organización sabían exactamente que se dirigía a Caracas; el que Chávez no hiciera nada por detenerlo sería escandaloso y contraproducente para su proyecto de lavado de imagen pues reafirmaría que esconde y protege terroristas, así que un Chávez sorpresiva y exageradamente colaborador lo deporta y Santos dice que fue porque se lo pidió expresamente a Chávez, ambos quedan como unos príncipes y las relaciones binacionales por inmejorable camino.
En ese punto estamos, todos muy felices, supuestamente; falta ver qué pasa con los jefes de las organizaciones terroristas que se esconden en Venezuela, los sacará Chávez?, les dará la espalda?, o siguen siendo muy importantes peones para su ajedrez de sometimiento de América latina a su proyecto de socialismo del siglo XXI?
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