La bestial agresión sionista contra una flota humanitaria perpetrada en aguas internacionales, que dejó una veintena de muertos y casi cien heridos, ha desatado una justificada ola de ira y desprecio hacia el régimen terrorista de Israel a nivel mundial.
Bajo la presión de la opinión pública y las movilizaciones de masas, varios gobiernos han cuestionado la bárbara acción sionista.
Desde Kampala, donde realiza una visita como parte de una gira africana, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se manifestó "conmocionado", y reclamó una investigación completa sobre lo sucedido.
Asimismo, el gobierno de Líbano solicitó una reunión urgente del Consejo de Seguridad, órgano presidido hasta hoy por el embajador libanés, Nawaf Salam.
El portavoz reiteró el repudio de la ONU al bloqueo de Israel contra Gaza que impide el flujo de materiales y mercancías destinados a cubrir las necesidades básicas de la población, la reconstrucción y la reactivación de la vida económica.
En su discurso en la apertura del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Navi Pillay, se mostró "conmocionada".
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, también se pronunció en contra del ataque y condenó el asalto del Ejército israelí ccatalogándolo como un "acto inhumano del régimen sionista".
"El acto inhumano del régimen sionista contra el pueblo palestino y el hecho de impedir que la ayuda humanitaria destinada a la población llegase a Gaza no es una señal de fuerza sino de debilidad de ese régimen", declaró Ahmadinejad.
El ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, expresó que el asalto es israelí es "injustificable".
"Nada justifica el uso de semejante violencia la cual condenamos", cita el texto. Por su parte, la delegada general de Palestina en Francia, Hind Khouri, calificó este suceso de barbarie y llamó a condenarlo en el mundo entero. "Es hora de poner fin a la impunidad de Israel para que el diálogo avance", declaró.
También la Liga Árabe, organización que agrupa a 22 países, a través de su representante, Yusef Ahmed, convocó una reunión urgente y emitió un comunicado en el que condenó el asalto militar israelí, al cual calificó de "crimen" y de "acción terrorista", informó la agencia oficial de noticias siria SANA.
Ese territorio sufre un férreo cerco implantado en 2007, a lo cual se suman las consecuencias de la invasión militar israelí realizada entre diciembre de 2008 y enero de 2009 con saldo de mil 400 muertos y más de cinco mil heridos, casi todos civiles.
La semana pasada el Programa de la ONU para el Desarrollo afirmó que alrededor del 75 por ciento de las construcciones dañadas en Gaza por la invasión israelí continúan sin reparación, debido a que el bloqueo impide la entrada de materiales de construcción.
Unas 10.000 personas manifestaron este lunes en Estambul para protestar contra el ataque mortífero israelí a una flotilla de ayuda humanitaria propalestina, formada en parte por barcos turcos, que se dirigía a la Franja de Gaza.
"¡Muerte a Israel!", "¡Soldados turcos, partan a Gaza!", gritaban los manifestantes congregados en la céntrica plaza Taksim, la principal de Estabul.
"¡Venganza! ¡Ojo por ojo, diente por diente!", voceaban otros manifestantes, enarbolando banderas turcas y palestinas.
"Israel cometió una matanza, es una inmensa injusticia. Hizo derramar sangre de inocentes. Este barco había partido únicamente con objetivos humanitarios", declaró Zeynep Ersoy, una mujer con velo islámico.
"Pido al gobierno que expulse al cónsul israelí... Y si hace falta, estamos preparados para la guerra", espetó Seref Mangal, de unos cuarenta años.
Con anterioridad, unas 400 personas corearon consignas antifascistas frente al consulado del Estado hebreo, en el barrio de Levent.
Algunos manifestantes lanzaron botellas de plástico al edificio, antes de ser repelidos por la policía.
En Ankara, casi 200 personas se congregaron frente a la residencia del embajador israelí, protegida por la policía.
Turquía criticó el ataque israelí y advirtió que el incidente podría acarrear "consecuencias irreparables" para las relaciones bilaterales. Sin embargo no rompió relaciones diplomáticas y económicas, sino que se limitó a llamar a consultas a su embajador en el Estado colonial israelí.
La mayoría de las víctimas de la masacre eran turcos. El gobierno turco, de características semifascistas, es un incondicional aliado de los EEUU, y también un cercano socio de Israel, pero ante el horrendo crimen sionista se ha visto presionado por la movilización popular a dar declaraciones contra Israel y a retirar su embajador en ese país.
"En la oscuridad de la noche, los comandos israelíes bajaron de un helicóptero al buque turco de pasajeros 'Mavi Marmara' y comenzaron a disparar en cuanto pisaron la cubierta", explica el sitio web del Movimiento Gaza Libre.
Las imágenes filmadas muestran escenas de caos, con perfiles oscuros de barcos de misiles israelíes asomando al fondo.
Árabes israelíes convocan a huelga general ante la matanza
La comunidad árabe de Israel convocó una huelga general en respuesta a la operación naval israelí y llamó a los ciudadanos a protestar. En respuesta, cientos de personas de diversa orientación política se echaron a la calle en la ciudad árabe israelí de Nazaret para protestar contra el ataque.
El movimiento islamista Hamas reaccionó llamando a la Autoridad Palestina "a suspender las negociaciones, directas o indirectas, con Israel a causa de este crimen", y llamando a movilizaciones frente a las embajadas sionistas.
Se publican imágenes de la masacre
Un portal de internet turco mostró un video del caos a bordo de uno de los buques, con activistas en salvavidas naranjas que corrían de un lado a otro mientras otros intentaban ayudar a una persona aparentemente inconsciente.
El canal de televisión turco NTV mostraba a activistas que se defendían desesperadamente con palos de los asesinos sionistas.
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