¿Qué hay detrás de la deportación del periodista Joaquín Pérez Becerra a Bogotá? ¿Quién sacrificó a este personaje cuyo delito “terrorista” es mantener una publicación de izquierda con información latinoamericana en Suecia? En la manera cómo se desarrolló su detención, tenemos que, como en el caso de Rodrigo Granda, otra vez los servicios de inteligencia colombiana intervienen abiertamente en nuestro país, ahora con la aparente autorización del Gobierno venezolano. El argumento de la campaña de descrédito esgrimido por Bogotá se cae por su propio peso. En primer lugar, desde el punto de vista de la libertad de expresión se trata de una política donde priva una doble moral. El gobierno de Santos considera a Pérez Becerra como el artífice de una campaña en contra de Colombia en Europa. Hasta donde se conoce, el ex guerrillero de las FARC maneja una página Web donde se dan a conocer entre otras cosas los comunicados emitidos por el movimiento insurgente colombiano. JPB había salido de su país tras ser asesinada su primera esposa hace más de 20 años, cuando él competía en un proceso electoral como miembro de la Unión Patriótica, una organización política cuyos miembros, en esa oportunidad, fueron víctimas de todo tipo de atentados para obligarlos a regresar a la vida clandestina. La detención en Venezuela de Pérez Becerra y su posterior deportación deja claro que el concepto de soberanía nacional es bastante elástico para Miraflores. Si hay una cuestión bien imprecisa para el Gobierno revolucionario es lo que tiene que ver con las extradiciones. ¿Por qué entregar a Pérez Becerra al Gobierno de Santos, sin exigirle públicamente garantías para su vida y un justo proceso, tal cual Colombia lo exige para entregar a Walid Mackled? ¿Qué relación hay entre esa política y el anunciado trato de reconciliación con Honduras? Está claro que Venezuela ha cedido en su política internacional. ¿Cómo logró Santos el “milagro”? ¿Mackled? En este ajedrez cualquier peón está en la mira de los sacrificios. ¿Por qué el gobierno de Chávez, a través de esta década, ha cedido ante Bogotá? No olvidemos el caso de Raúl Reyes y de cómo el presidente de Ecuador quedó sin balance en la cumbre de Santo Domingo tras repentinamente Chávez cuadrarse con el entonces presidente Uribe. ¿Qué está pasando realmente con la diplomacia venezolana? ¿Está a merced de la oligarquía colombiana? ¿Por qué Venezuela no ha exigido que Colombia cumpla con la extradición de Pedro Carmona? Dirán que Bogotá alega que éste cuenta con asilo político. ¿Qué pasaría si mañana Alfonzo Cano pide asilo en Venezuela? Demos por descontado que Colombia agotaría todos sus recursos para que el mismo fuera entregado a su Gobierno. Si Caracas deportó a Pérez Becerra por qué no pensar que lo haría más rápido con Cano. ¿Por qué Walid Mackled? Se sabe que Washington no tiene mayor interés en obtener su extradición porque ya al presunto narcotraficante le tomaron declaración los organismos policiales de Estados Unidos. ¿Quién le teme a Walid Mackled? ¿Cómo se relaciona la deportación de Joaquín Pérez Becerra con el tira y encoge de la extradición de WM a Venezuela? ¿Por qué Miraflores acepta la cínica solicitud de un Gobierno que exige garantías de vida y el debido proceso, como si quien viola los derechos humanos es el Gobierno venezolano? ¿Quién traiciona a quién?
SAINETE. A propósito del fin de la semana mayor, me llama la atención la campaña de la gobernación de Anzoátegui por convencer acerca de una presunta optimización de la vialidad en esa entidad. Lamento desmentir a ese ente, sobre todo porque estamos frente a otro caso de manifiesto interés en no rectificar. Las carreteras de Anzoátegui están en muy mal estado. Deploro la posición de la gobernación y, aun cuando estimo a quien la conduce, no es nuestro estilo incurrir en la falsa solidaridad. La debacle electoral del 26S quedó atrás y la mojiganga publicitaria regresa con mayor brío.
MENOSCABO. Es un hecho la destitución del general Carlos Martínez como presidente de Corpozulia. Lo sustituye el general Arévalo Méndez. El saliente se había convertido en la piedra de tranca en detrimento de la campaña de Arias Cárdenas en procura de la reconquista de la Gobernación del Zulia.
REENCARNACIÓN. No se sabe a ciencia cierta el día cuando Nicolás Maduro se hizo adepto al culto de Sathya Sai Baba, pero debe haber sido años después de que el médico colombiano Carlos Cuéllar confesó públicamente que su vida había cambiado tras contactar al cuestionado líder espiritual nacido en un remoto pueblo del sur de India. No sería sólo el hoy canciller de Venezuela uno de los que lloran la muerte de quien además de considerarse a sí mismo como una reencarnación de una divinidad hindú, fue objeto de numerosas denuncias por delitos de abuso sexual (nunca comprobados), hoy no es sólo la Casa Amarilla un fortín de sus seguidores, sino también múltiples oficinas públicas donde en abierta contradicción con el marxismo, su culto compite con la de los santeros de distintas cortes africanas. Por ejemplo, tras la muerte de Sai Baba ocurrida el pasado 24, en un mensaje atribuido a la cuenta twitter de Aristóbulo Istúriz se anunciaba su deceso como “un pase hacia la vida espiritual”. La máxima de Aristóbulo fue borrada al poco rato. La desaparición del guía hindú podría servir en Venezuela para abrir un debate acerca de la multiplicación de los ritos y adoraciones en tiempos de revolución.
CINISMO. Los inmorales nos han igualado, reza el tango. Yo no digo que ese sea el caso del general Guaicapuro Lameda, dos veces ex presidente de Pdvsa (destituido por Chávez, restituido en su cargo por Pedro Carmona y vuelto a destituir tras la caída del “breve”), pero, que alguien me diga cuál es la capacidad financiera de Lameda para comprar un equipo de balompié. Él mismo se ha anunciado con bombos y platillos como nuevo amo del club Atlético Venezuela de la Liga Profesional de Fútbol.
CAPITAL. Si tomamos como cierta la afirmación leninista según la cual el imperialismo se define en la exportación de capitales, entonces, en contra de todo pronóstico revolucionario, Venezuela es ahora una especie de sub imperialismo regional, por cuanto se han multiplicado las inversiones de los capitalistas nacionales en el área latinoamericana. Así cunden los desarrollos habitacionales en Colombia, Panamá y otros países de la región financiados con capital venezolano. Como última noticia tenemos que en la onda de las inversiones de empresarios criollos en el extranjero, un venezolano es el estrenado propietario de una aseguradora panameña cuyo antiguo dueño era el hoy presidente de ese país Ricardo Martinelli. El nuevo cacique de la firma logró subirla del quinto al tercer lugar en el ranking de las empresas de ese sector en Panamá. Ahora se ha hecho de 60% de las acciones de la Universidad Internacional del Caribe. Después se quejan del comunismo que los está matando.
LOBBY. La muerte de Sai Baba trae al tapete su influencia en nuestro mundo diplomático. Su nombre es relacionado con factores de intriga que hicieron implosión recientemente con la destitución del cónsul de Venezuela en Miami. Su remoción es atribuida a Cirilo Rodulfo, un personaje que se hace llamar enviado de Sai Baba, quien logró que Antonio Hernández Borgo recibiera a los hermanos Castillo Bozo (banqueros prófugos), en la búsqueda de un lobby que solventara su situación ante la justicia venezolana.
OPERADORES. Vendieron Avior. En la transacción, donde la línea aérea cambia de dueños, aparecen los operadores de los bienes de Carlos Kauffman en nuestro país. En pocas palabras, el ahora piloto de carros de carrera sería el nuevo propietario de Avior. Son muchas las empresas inscritas en el Sitme que pertenecen al bisoño corredor automovilista.
SICILIA. Como en los mejores tiempos de las luchas intestinas de la mafia siciliana, tenemos que un personaje conocido como El Ruso, quien durante la gestión de Tobías Nóbrega jugó un papel preponderante en las finanzas públicas, se habría alzado con el santo y la limosna de un ex gobernador regional ahora imputado por el Ministerio Público, quedándose con sus propiedades.
MISILES. Próximamente la Corte Suprema de USA decidirá si revisa o no la decisión por parte de la Corte de Apelación del Sexto Circuito de Cincinnati, Ohio, sobre el caso de los bonos de Bandagro. Como se sabe, 23 jueces contra 0 votaron a favor de los tenedores de los bonos. Las probabilidades de que Venezuela gane el juicio son casi nulas. Entretanto son millonarias las sumas que se han ganado los abogados que han representado a la República. Son muchas las cabezas que estarían por rodar. COLISIÓN. El próximo jueves 5 de mayo, a las 6:30 pm, en la librería El Buscón (CC Trasnocho Cultural de El Paseo de Las Mercedes) tendrá lugar el bautizo del libro Choque de generales, la ruptura que liquidó la hegemonía andina; el autor de la obra es nuestro columnista Rafael Simón Jiménez. El prólogo es de Diego Bautista Urbaneja y fue editada por el sempiterno José Agustín Catalá. ¡Éxitos, Rafael!
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